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Concepto de identidades alternas en el trastorno de personalidad múltiple

¿Qué es un Trastorno de identidad disociativo?

Descubra qué es el Trastorno de Identidad Disociativo, sus causas, síntomas, y las alternativas para su tratamiento integral en psicología moderna.

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Publicación: 9 de Abril de 2021

Trastorno de personalidad múltiple

¿Qué es el Trastorno de Identidad Disociativo? ¿Cuáles son sus causas? ¿Cómo se trata? Aprenda, a través del presente artículo, la realidad de este complejo trastorno.

Trastorno disociativo, memoria y percepción

Un trastorno disociativo es una alteración de las funciones integradoras de la conciencia, la identidad, la memoria y la percepción del entorno.

La memoria del sujeto con trastorno de personalidad múltiple se ve alterada

Trastorno de personalidad múltiple y memoria

Una persona con trastorno de identidad disociativo (antiguamente conocido como trastorno de personalidad múltiple) puede ser controlada de manera alternativa y recurrente a través de dos o más identidades diferentes, cada una independiente del resto; además, no le es posible recordar lo que naturalmente recuerda en otros momentos, como información personal, acontecimientos cotidianos, o eventos traumáticos o estresantes.

En algunos casos no se recuerdan cosas tan básicas como información personal

Pérdida de información personal en trastornos disociativos

Causas

La causa principal de este trastorno se atribuye a la exposición, durante la infancia, a eventos traumáticos como maltrato psicológico, físico, abuso sexual o pérdidas significativas, lo cual puede favorecer a que el niño presente dificultades al desarrollar su personalidad adulta. Este trastorno, generalmente es asociado con problemas de ansiedad o estrés pos traumático.

Los eventos traumáticos pueden configurar un trastorno de identidad disociativo

Impacto de los eventos traumáticos en trastornos disociativos

La disociación es generada precisamente por las experiencias estresantes, y que al niño evitar, recurrentemente, recordar el sufrimiento o malestar vivido, como mecanismo natural de defensa, produce el desarrollo de las diversas identidades, las cuales a medida que éste va creciendo y madurando se hacen más complejas y definidas. De allí, que se considere que dicho trastorno está orientado a la anomalía en el desarrollo de la identidad desde la infancia, y no tanto como el resultado de la fragmentación de la identidad principal de la persona.

Las diversas identidades se van desarrollando a medida que van creciendo

Crecimiento y múltiples identidades

Síntomas

El trastorno de identidad disociativo presenta varios síntomas característicos, entre los cuales se destacan:

  • Amnesia: la persona experimenta la imposibilidad de recordar acontecimientos personales pasados o cotidianos actuales, incluso habilidades adquiridas y fijadas en el repertorio conductual. Además, puede descubrir que ciertamente hizo algo, lo cual no recuerda ni cómo ni cuándo lo hizo. Es como si un lapso de tiempo no hubiese trascurrido o ha quedado en blanco. La amnesia puede darse también en distintos grados y niveles.
  • Más de una identidad: el individuo presenta dos o más identidades. Cada una independiente del resto, con un patrón propio y bien definido de pensar, sentir y actuar. En ocasiones, es posible que una identidad sea consciente de la existencia de otras. Incluso, a una identidad pueden manifestarse otras personalidades en forma de alucinaciones visuales o auditivas.
  • Alternancia: hace referencia a lo recurrente del control que cada identidad toma del individuo, mostrándose éste realmente distinto en cada episodio.
Lapsos de tiempo del individuo pueden verse borrados en la amnesia

Amnesia y recuerdos borrados

Otros síntomas asociados a diversos trastornos mentales o enfermedades orgánicas también son comunes, como: depresión, ansiedad, conducta autolesiva y suicida (ideación e intentos), episodios de mutilación. Con frecuencia se manifiestan disfunciones sexuales.

La depresión y la ansiedad son comunes en este tipo de trastornos

Depresión y ansiedad comunes

También, se manifiestan síntomas pseudopsicóticos: voces alucinadas, imágenes visuales de las identidades alternantes y fenómenos alucinatorios complejos. Sin embargo, estos síntomas alucinatorios difieren de las alucinaciones características de los trastornos psicóticos.

Diagnóstico

El diagnóstico de este trastorno es realizado por un equipo de salud mental, encabezado por un médico psiquiatra, de acuerdo a los siguientes criterios, según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales en su quinta edición- DSM V- de la Asociación Americana de Psiquiatría:

  • Perturbación de la identidad que se caracteriza por dos o más estados de la personalidad bien definidos, que se puede describir en algunas culturas como una experiencia de posesión. La perturbación de la identidad implica una discontinuidad importante del sentido del yo y del sentido de entidad, acompañado de alteraciones relacionadas del afecto, el comportamiento, la con-ciencia, la memoria, la percepción, el conocimiento y/o el funcionamiento sensitivo-motor. Estos signos y síntomas pueden ser observados por parte de otras personas o comunicados por el individuo
  • Lapsos recurrentes en la memoria de acontecimientos cotidianos, información personal importante, y/o sucesos traumáticos incompatibles con el olvido ordinario.
  • Los síntomas causan malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funciona-miento.
  • La alteración no es una parte normal de una práctica cultural o religiosa ampliamente aceptada.

Nota: En los niños, los síntomas no deben confundirse con la presencia de amigos imaginarios u otros juegos de fantasía.

En los niños pueden aparecer amigos imaginarios, no nos confundamos

Amigos imaginarios en infancia

Los síntomas no se pueden atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej., laguna mental o comportamiento caótico durante la intoxicación alcohólica) u otra afección médica (p. ej., epilepsia parcial compleja.

Es importante resaltar que dicho diagnóstico, dada la complejidad del trastorno, debe agotar el protocolo sugerido: entrevistas clínicas minuciosas, aplicación de instrumentos específicos, discriminación de otras patologías fronterizas, validación y contrastación de síntomas que resulten similares a ciertas alteraciones orgánicas que en absoluto tienen que ver con el Trastorno de Identidad Disociativo.

Es un trastorno complejo que debe ser minuciosamente analizado por expertos

Trastorno complejo bajo análisis

A propósito de esto, cabe destacar que este trastorno, dada sus particulares características, es uno de los más difíciles de diagnosticar, ya que en ocasiones tiende a confundirse con otros trastornos como la amnesia disociativa, la fuga disociativa incluso la esquizofrenia.

El trastorno identidad disociativo se confunde algunas veces con esquizofrenia

Confusión entre trastorno de identidad y esquizofrenia

Tratamiento:

El tratamiento indicado para el trastorno de identidad disociativo es largo y complejo; éste combina:

  • 1
    Farmacología: Se emplea a fin de controlar síntomas de ansiedad o depresión.
  • 2
    Psicoterapia: se usa como estrategia de intervención para el logro de objetivos. La misma está organizada en tres etapas:
    • Primera etapa: el objetivo del terapeuta es proveer al paciente estabilidad por medio del control de los síntomas.
    • Segunda etapa: está dirigida a confrontar los recuerdos molestos o traumáticos hasta superarlos.
    • Tercera etapa: el terapeuta busca la integración de las distintas personalidades y la restauración de la identidad original, de resultar imposible, intenta lograr la coexistencia adecuada entre las distintas personalidades.
  • 3
    Hipnosis clínica: se utiliza a fin de ayudar al paciente a mantener la calma, a modificar la interpretación que hace sobre los acontecimientos y para acorazarle en relación al impacto emocional que han generado los recuerdos traumáticos. En algunos casos, resulta útil en el adiestramiento que se le hace al paciente para el manejo y control de la alternancia de sus identidades.

Muy a menudo estas intervenciones logran extenderse por años, requiriendo en momentos la intervención al paciente en centros de hospitalización psiquiátricos.

El tratamiento puede durar años y algunas veces requieren hospitalización

Tratamiento de largo plazo y hospitalización

Referencias

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